El Táchira despide a una de sus leyendas: Lolita Robles
Este martes falleció la reconocida escritora Lolita Robles de Mora, quien a través de sus investigaciones inmortalizaría al Táchira al destacar sus historias y leyendas.
La aventura intelectual de Lolita por el mundo de la literatura oral venezolana no sólo fue extensa y fecunda, sino utilísima en su contribución al fortalecimiento y desarrollo del ethos del país y del Táchira, pueblo que la recuerda con una sonrisa eterna.
Maria de los Dolores Robles Montes, mejor conocida como Lolita Robles de Mora, nació el 6 de mayo de 1933 en Noreña Aturias (España), pero los páramos andinos la adoptarían desde muy pequeña.
Influenciada por su padre se inicia desde muy temprana como coleccionista de historia; incursionando en la tarea de la recopilación de la tradición oral desde las producciones provenientes de los estratos más profundos del origen étnico con sus mitos aborígenes de los wayuú, de los yanomamis, de los pemones, de los waraos, hasta las leyendas de la vida criolla, mestiza de los horizontes campesinos y de los sectores urbanos más cercanos en la geografía y en la contemporaneidad.
Muchas de ellas son plasmadas en los libros "Leyendas del Táchira", donde se refleja el amor adquirido a las hermosas tierras de los andes venezolanos que contiene en la voz de sus campesinos una vasta tradición oral.
También se le recuerda como vicepresidenta de la Asociación de Escritores del Táchira; siendo además, miembro de la Peña Literaria Zaranda y de la Peña Literaria Manuel Felipe Rugeles.
Nace la leyenda
En el caso especial de las leyendas del Táchira su manera de trabajar fue asombrosa: no se quedó únicamente en la fase de recoger el contenido de boca de los informantes, sino los estudió cuidadosamente, convirtiéndola en un documento literario diáfano: la fuerza originaria del relato oral por la vía luego de la buena prosa se transforma en el grato texto de una leyenda ahora escrita.
Igualmente, en los años 2010-2011 a través de Vive Andes se realiza el seriado para televisión bajo el título Leyendas del Táchira, mediante las cuales se recogió el legado oral y testimonial de la autora, convertida en formato audiovisual, con el objetivo de que una nueva generación pudiera conocer las narraciones propias de Los Andes venezolanos.
La ardua tarea de recopilar, de investigar, de redactar, de divulgar y, al través de la misma, establecer nexos dinámicos en torno a esta labor en extensos sectores de la población, pertenece al esfuerzo de una etnóloga, quien no contenta con llegar a la etapa de publicar sus estudios, hizo de éstos un instrumento activo de fortalecimiento del ethos del país, de una región, de un Estado.
Hay ahí, indudablemente, una labor patriótica, un hacer Venezuela en el horizonte de su existencia espiritual, artística; un valioso aporte a la cultura humanística nacional; reuniendo los mérito para que en el año 2012 recibiera el título de Maestra honoraria de la Universidad Nacional Experimental de las Artes –Unearte-, siendo postulada por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura.
Por todo esto, el Táchira despide a una de sus insignes hijas, cuyo legado queda inmortalizado en la neblina de los páramos, en el murmullo de los ríos y en las historias que conocerá las nuevas generaciones.
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